Click para ir al número anterior

ANTERIOR

EL CUENTOMETRO DE MORT CINDER

SIGUIENTE

Click para ir al número siguiente

508 •  MILENIO DE LA MENTE

 

Viernes, 16 de mayo de 2003

Al índice

Click para ir al índice

¿Sabía que una edición de cualquier diario actual contiene más información que la que recibía la gente del Siglo 17 en toda su vida?
¿Sabía que las personas de hoy en día trabajamos con cinco veces más volúmenes de información que hace sólo 20 años?

Si queremos vivir con un poco de cordura, tenemos que buscar un balance en nuestras vidas. Lo irónico es que ¡nuestro día sigue siendo de sólo 24 horas! Esto implicaría trabajar ocho horas, descansar otras ocho y pasar otras ocho en asuntos personales, como familia, ejercicio, espiritualidad, socialización y demás.

Necesitamos ser gente de cerebro completo, usar todos los sistemas, hemisferios y lóbulos del cerebro como una unidad y alinearlos de forma que el cerebro funcione mejor de una manera natural. De acuerdo con las investigaciones de André Vermeulen en su manual "Advanced Whole Brain Integration", hay siete principios básicos para lograr esto, y son:

  1. Estimúlese físicamente. Muévase. Baile, haga ejercicio aeróbico, nade, juegue tenis, fútbol. Haga ejercicios de lateralidad, por  ejemplo con la mano izquierda toque su oreja derecha y con la mano derecha toque su nariz. Ahora al revés y repítalo varias veces hasta dominarlo.
  2. Tome ocho vasos de agua. De acuerdo con los  expertos, esto no  es opcional, es obligatorio, si queremos que nuestro cerebro funcione de una manera óptima. Y si estamos estresados, debemos aumentar a 16 vasos de agua al día. El 90 por ciento del volumen de nuestro cerebro está compuesto por agua y es el principal vehículo de las transmisiones electroquímicas.
  3. Oxigénese. Haga ejercicio, salga al campo. Antes de una junta importante o de un trabajo que necesite concentración respire hondo. Respire en 4 tiempos, sostenga el aire en 16 y exhale en 8. El doctor Otto Warburg, Premio Nobel de Fisiología, hizo un experimento en el cual logró convertir células sanas en malignas, a través del sencillo procedimiento de reducirles el oxígeno. Rodéese de plantas ¿Sabía que una sola  planta puede remover partículas contaminantes del aire en un espacio de 9 metros cuadrados? Las plantas aumentan la ionización negativa del aire y lo cargan de oxígeno, aumentando nuestra productividad en un 10 por ciento. Algunas plantas como las dársenas han probado ser  de las mejores para esto.
  4. Consuma alimentos para el cerebro. Al cerebro le conviene que comamos cinco porciones de fruta y verduras al día, semillas, nueces, ajo, granos completos, champiñones, aceites prensados en frío y proteínas. El pescado literalmente genera la construcción de nuevas neurocélulas.
  5. Piense positivamente. Los pensamientos negativos generan químicos que bloquean la conexión entre los neurotransmisores. Como decía Henry Ford: "Si piensas que puedes o que no puedes, siempre estarás en lo correcto".
  6. Escuche música barroca. La música es la puerta hacia terrenos interiores; toca lugares fuera de nuestro alcance. Ayuda a la creatividad,a la expresión personal. Facilita el aprendizaje. Un granjero comprobó que al ponerle música barroca a sus vacas, en ellas había un aumento en la producción de  leche y en sus glóbulos blancos.
  7. Rete a su cerebro. Si no lo usamos, lo perdemos. Juegue ajedrez, resuelva crucigramas, aprenda a tocar un instrumento, haga  matemáticas, viaje a lugares nuevos, vaya a exposiciones de arte, lea, estudie algo. Escriba y dibuje con su mano no dominante. Abra su mente a nuevas experiencias y formas de pensar. Todo esto genera que el cerebro funcione mejor.

Podemos concluir que en este llamado Milenio de la Mente, la única manera de ser competitivos y mantener un balance en nuestras vidas es no trabajar más, sino trabajar mejor.

Colaboración Flia Stern